Uno de los empleos de los globos aerostáticos es la publicidad. Se trata de una operación de marketing, muy original y eficaz, que permite una máxima visualización por parte de los clientes gracias a los globos publicitarios. Este tipo de inversión permite:
- Máxima atención. Siendo fácilmente visible, los globos publicitarios conseguir atraer fácilmente la atención de una gran porción de posibles clientes.
- Gran impacto. Los globos llegan fácilmente a tener un 90% de impacto en las personas, siendo una estrategia de marketing poco común y que atrae fácilmente la atención.
- Conocimiento y notoriedad. Se ha observado como las marcas que aparecen en los globos publicitarios, son reconocidas y fácilmente recordadas por los clientes. Se considera que el porcentaje de conocimiento es del 96% y la marca es recordada por el 96% de las personas.
- Flexibilidad geográfica. Los globos tienen la ventaja de poder volar en cualquier lugar. Es más, podemos decidir si queremos dejarlos fijos en un sitio durante un tiempo o si dejarlos volar de ciudad en ciudad.
- Inversión más conveniente. Es evidente que el impacto de los globos publicitarios es más fuerte que cualquier otra estrategia publicitaria que concierne a la visualización y al reconocimiento. Además la duración media de un globo es mucho mayor, por ejemplo que la un cartel publicitario (un globo más o menos puede tener una duración de 5 años, o de 300 horas de vuelo).
Los globos publicitarios se basan en la idea de utilizar el único espacio libre de publicidad: el cielo. De esta manera, se aprovecha el hecho de que el ser humano no está aun acostumbrado a esquivar la publicidad que aparece el aire y sí consigue rechazar fácilmente las estrategias publicitarias que se han vuelto tan comunes hoy en día, como las de los carteles publicitarios, flyers y otras. Las calles de las ciudades y las tiendas están tan llenas de estos medios publicitarios, que ya hemos aprendido a evitarlos, sin darnos ni cuenta.